No, el efecto no se rompe, simplemente se adapta a la realidad del mercado. Las fluctuaciones y los años negativos son normales en la inversión a largo plazo. En un año de pérdidas, tu capital base para el siguiente año será menor.
Sin embargo, si mantienes la disciplina y continúas con tus aportaciones periódicas, estarás comprando participaciones a un precio más bajo. Esto puede potenciar la recuperación y acelerar el crecimiento cuando el mercado vuelva a subir, manteniendo intacto el poder del interés compuesto a largo plazo.