Un accidente positivo de riqueza es una inversión en la que el rendimiento potencial es desproporcionadamente mayor al riesgo asumido.
En otras palabras, se trata de oportunidades donde la posible ganancia puede superar (con creces) lo que estás dispuesto a perder.
No es puro azar ni especulación sin fundamento, sino más bien una inversión con asimetría favorable riesgo‑beneficio.