Al buscar qué cuenta remunerada es mejor para ti, debes tener en cuenta la rentabilidad real (TAE), requisitos como domiciliar una nómina u otros ingresos, contratar otros productos, el saldo máximo remunerado y las comisiones asociadas.
Es esencial considerar también la duración del tipo promocional y si existe permanencia mínima.
La facilidad de contratación y la seguridad de la entidad también son factores clave.