Existen diversas opciones más rentables y, en general, con menores comisiones que los PIAS:
- Depósitos a plazo fijo y cuentas remuneradas, ideales para quienes buscan seguridad y liquidez.
- Letras del Tesoro, bonos y obligaciones del Estado, alternativas de renta fija pública de gran seguridad.
- ETFs o fondos indexados de renta fija, que ofrecen diversificación con bajos costes.
- Roboadvisors, que automatizan la inversión en fondos indexados y ajustan la estrategia según el perfil de riesgo.
- Fondos indexados y ETFs de renta variable, con mayor potencial de rentabilidad a largo plazo.
- Inversión directa en acciones o dividendos, adecuada para perfiles más avanzados.
Dependiendo de tu perfil de riesgo y del horizonte de inversión, algunas de estas opciones pueden ser más atractivas que un PIAS.