El rescate suele ser posible al jubilarse, pero también en casos excepcionales, como por ejemplo:
- Incapacidad laboral total.
- Paro de larga duración.
- Enfermedad grave.
- Aportaciones con más de 10 años de antigüedad.
Puedes rescatar el plan en forma de capital (un único pago), renta (pagos periódicos) o una combinación de ambos. Es importante que consultes con detenimiento estos detalles si tienes la intención de contratar un plan de pensiones.