Oferta de activos: verifica si permite operar con acciones, ETFs, fondos, etc.
Comisiones: revisa costos de operación, spreads y tarifas ocultas.
Regulación: asegúrate de que esté supervisada por organismos oficiales como la CNMV.
Facilidad de uso: busca una interfaz intuitiva y estable.Seguridad: verifica sus protocolos de protección de datos y fondos.