Las comisiones (gestión, depósito, suscripción, reembolso, éxito) reducen la rentabilidad a largo plazo porque aplican “interés compuesto en tu contra”.
Es crucial analizar el Total Expense Ratio (TER) para evaluar el coste real del fondo, ya que un fondo caro no garantiza mayor rentabilidad.
Las clases limpias, sin intermediarios, suelen tener comisiones inferiores.